El 19 de abril, las chicas y los chicos de 6° año que cursan el taller optativo “Cocina y Antropología”, vivieron una mañana especial. Ese día visitó el Liceo la profesora Susana Jalo, descendiente de la comunidad siriana en Argentina. La invitada compartió con las/os estudiantes y docentes la historia y tradiciones de su familia y les mostró cómo cocinar keppe, comida típica de la gastronomía del mundo árabe, en especial en países como Siria, Líbano, Armenia y en regiones como parte del Cáucaso y el norte de África.
Jalo mostró como preparar esta comida, tal como se lo enseñó su abuela Marín, acá llamada María, que vino a la Argentina cuando tenía solo 13 años huyendo del genocidio turco sobre las minorías étnicas. Jalo contó que aquí Marín se casó ni bien llegó y el cocinar fue su refugio para recrear la antigua vida en Siria, el recuerdo de su tierra y de sus padres. También contó que su abuela nunca aprendió el español y que le enseñó a cocinar con gestos y unas pocas palabras.
El keppe es comida que recibe diferentes nombres y pronunciaciones, según la zona de donde provenga: kibbeh, kipe, kubbe, kupe, quepe, y proveniente del árabe, “kubbah” que significa bola. Este alimento, en su forma más corriente, es una especie de albóndiga elaborada con las manos que se compone de carne picada de cordero o de vaca con trigo burgol y especias. Se puede comer crudo (denominado Kibbe Nayye) o frito. Cuando la opción es frita, se fríe en aceite abundante hasta que queda una “costra” o corteza dura en su exterior.
Las talleristas contaron que con la invitación de Susana Jalo al taller “pudimos profundizar junto a les chiques en un tema que nos interesa mucho, que es la relación entre la memoria y la cocina. ¿Cuánta memoria, cuánto pasado e historia caven en un plato de comida? ¿Cuáles son los fantasmas que asisten en nuestras cocinas? Son algunas de las preguntas que les propusimos a les estudiantes para reflexionar durante la clase. Pensamos que la comida puede muchas veces ser un umbral de encuentro entre vivas/os y muertas/os, donde las ausencias se manifiestan en formas de gestos, hábitos y costumbres que asisten y cobran vida en nuestras cocinas.”
También participó de la actividad la prof. Gabriela Arreseygor, Coordinadora de la Orientación en Ciencias Sociales. El taller optativo “Cocina y Antropología” es coordinado por las docentes Rocío Arisnabarreta, Mora Carrizo, Celina Lanza y Macarena Molaro. A partir de la pregunta “¿por qué son tan distintas las comidas de diferentes culturas?”, las talleristas proponen conocer la alimentación desde una dimensión sociocultural: historias, culturas, tradiciones y memorias que están detrás de cada comida. Así, en este taller, invitan a las y los estudiantes a cocinar diferentes recetas y reflexionar sobre el lugar de lo social en la comida.
“Todo un universo que se derrama en sus platos y recetas favoritas en donde circulan imágenes y sonidos de sus programas de TV favoritos, los aromas de sus casas y los sabores que les remiten a una etapa pasada de su vida. La idea del taller es que puedan plasmar todas estas vivencias en un recetario colectivo que vamos a elaborar como cierre de esta primera edición para compartir entre todes nuestras recetas queridas”, afirmaron las docentes.